Las etapas del desarrollo socioafectivo hablan del desarrollo en general del individuo. Este, influye en las habilidades sociales y afectivas que forman a las personas en cuando a su entorno social, relaciones interpersonales e incluso intelectuales.
De este modo, es importante que se trabaje y fortalezca desde edades tempranas, para que el niño pueda adaptarse a su entorno y encuentre un equilibrio es su personalidad.
Por otro lado, el entorno social, escolar y familiar, son de gran relevancia a la hora de fortalecer o adquirir dichas habilidades. Es claro mencionar, que los niños en gran medida optan por las actitudes que observan de las personas mayores a ellos, por ende, las buenas relaciones y la comunicación asertiva, son factores claves en el desarrollo de los niños.
Importancia de las etapas del desarrollo socioafectivo
El desarrollo socioafectivo se divide en diferentes etapas, de acuerdo con la edad de cada niño y a la capacidad cognitiva del individuo. Cada etapa va a depender del proceso de aprendizaje de cada persona. Pues cada etapa, ayuda en el desarrollo y/o fortalecimiento de habilidades emocionales, sociales, cognitivas, motrices, etc.
El ámbito social que se puede generar entre la familia y escuela puede generar que el descubrimiento y manejo de emociones sede con asertividad o no. De aquí, podemos decir que el desarrollo personal de cada individuo, parte en los primeros años de vida de las personas y de las vivencias de cada uno.
Las emociones hacen parte del crecimiento normal de cada individuo, por ende, es indispensable que a corta edad se traten de manejar e identificar para poder moderar conductas agresivas.
¿Cuáles son las etapas del desarrollo socioafectivo?
Fase de preapego
Esta fase, generalmente va desde las seis semanas de nacido debido a que los niños requieren de la protección de un adulto, para poder satisfacer muchas de sus necesidades, como es el comer y cuidados básicos. Cabe mencionar, que el pre-apego, no necesariamente va dirigido a la madre, sino que puede ser cualquier persona que le brinde comodidad al niño.
Por otro lado, a medida que los niños van creciendo, buscan de alguna forma comunicar lo que necesitas, sin necesidad de emplear el lenguaje apropiadamente. Aquí comienzan las conductas afectivas y es ahí, donde el núcleo familiar puede aportar en gran medida a las habilidades socioafectivas y emocionales que formen la personalidad y carácter del infante.
Fase de formación de apego
Esta fase va guiada a edades de 6 semanas a 8 meses de nacido, de acuerdo con las necesidades y habilidades motrices, sociales y de lenguaje de los niños, ellos buscan la aprobación o desaprobación de las personas, según sus acciones. Esto también va muy ligado a al desarrollo afectivo-emocional que ha logrado adquirir el sujeto en su entorno familiar.
En estas edades, también es importante establecer relaciones interpersonales y fortaleces las habilidades sociales, pues la amistad comienza a representar un factor importante y de este modo se llega a comprender el significado de los valores, el sentido de seguir las normas y órdenes.
Fase de apego bien definido
Esta fase también está presente a partir de los 8 a 18 meses de nacidos, pues conta en el sentimiento de angustia y no soportan estar lejos de sus figuras maternas, además, no les gusta la interacción de personas diferentes o desconocidas debido a que representan inseguridad y/o peligro. Aquí los niños comienzan a moderar su conducta.
Formación de relaciones reciprocas
La última fase de relaciones reciprocas, inicial aproximadamente a partir de los 24 meses en adelante. Aquí, los niños comienzan a adquirir nuevas capacidades en su desarrollo intelectual y de comunicación.
Por otro lado, los niños aceptan el desapego temporal de su figura materna y controlan con mejor su ira y ansiedad.